Cómo Potabilizar Agua de Pozo. Procedimientos y tratamientos del agua subterránea
Saber cómo potabilizar el agua de pozo antes de su consumo, es fundamental para asegurarse de que esté libre de bacterias, virus, parásitos y demás contaminantes.
El agua de pozo es una fuente común de abastecimiento en áreas rurales y residencias que no están conectadas a sistemas municipales de agua potable y que por tanto no está exenta de riesgos para la salud humana.
A continuación vas a ver los pasos necesarios para obtener una agua segura y de buena calidad.
Paso 1 : Inspección de la zona
Es importante tener localizados posibles focos de contaminación del agua en la periferia del terreno. Es recomendable averiguar si hay industrias ganaderas dónde el agua podría tener restos fecales, por ejemplo, o campos de cultivo dónde hay riesgo de pesticidas o ríos que pueden transportar restos orgánicos por citar algunos…
Además según la inclinación y la ubicación del terreno pueden variar parámetros como el flujo de agua, la viscosidad, la temperatura, la presión o la densidad.
Estos parámetros, como podemos ver en este otro articulo de como extraer agua de pozo, también son muy importantes a la hora de elegir el método más adecuado para conseguir agua subterránea.
Paso 2 : Analizar agua de pozo
Una vez averiguado el origen y el recorrido del agua de la zona , es necesario realizar un análisis exhaustivo de la calidad del agua del pozo para detectar que tratamiento es el más indicado. Estos son los datos que se pueden extraer:
– Contaminantes microbiológicos:
Bacterias como la Escherichia coli, virus y parásitos, son patógenos comunes en el agua de pozo y pueden provocar enfermedades gastrointestinales.
– Contaminantes químicos:
El agua del subsuelo puede contener contaminantes químicos como nitratos, metales pesados (plomo, arsénico, mercurio) y productos químicos agrícolas (pesticidas, herbicidas).
– Características físicas:
Color, sabor, olor y turbidez del agua también se analizan, ya que pueden afectar la percepción y calidad del agua tratada, a parte de poder requerir una fase más de filtrado.
– Propiedades y componentes:
PH, residuo fijo, conductividad, dureza, calcio, magnesio, alcalinidad, sulfato, nitrato, nitrito, amonio, cloro residual, oxidabilidad, hierro, minerales… Como ves, hay muchos elementos presentes en la composición del H2O. Cada medición nos proporcionará unos resultados para saber la presencia que hay de todos. A partir de ahí, se procede a establecer los tratamientos oportunos para cada uno de ellos.
Los resultados de todos estos análisis son vitales, para elegir el sistema de potabilización más adecuado para cada terreno y tipología de agua.
Paso 3 : Tipos de filtros para agua de pozo. Pretratamiento y filtración inicial
El pretratamiento es un paso esencial cuando se busca cómo potabilizar agua de pozo, ya que permite eliminar partículas grandes y reducir la turbidez, mejorando la efectividad de los sistemas de purificación posteriores. Los filtros más comunes para esta etapa son:
Filtros de sedimentos
Los filtros de sedimentos son una primera barrera contra partículas grandes, como arena, tierra y partículas, que podrían interferir con otros sistemas de tratamiento. Este tipo de filtro usa una membrana o malla de distintos grosores (normalmente entre 1 y 10 micras) que retiene estas partículas. En este enlace puedes encontrar estos filtros en la sección recambios de la web.
Filtros de carbón activado
El carbón activado es el resultado de llevar a temperaturas de hasta 1000 grados las piedras de carbón. De esta forma adquiere la propiedad de atrapar sustancias que entren en contacto.
En la filtración de agua es eficaz para mejorar el sabor y el olor del agua al eliminar compuestos orgánicos volátiles, cloro y algunos pesticidas. También ayuda a reducir ciertos contaminantes químicos que pueden estar presentes en el agua.
Este pretratamiento es esencial porque garantiza que los sistemas de purificación posteriores (como la desinfección y la ósmosis inversa) puedan operar de manera óptima, al reducir las obstrucciones y la carga de partículas.
Filtros de Cerámica
Estos filtros utilizan una barrera de cerámica micro porosa para atrapar partículas y microorganismos. Son efectivos para eliminar bacterias, protozoos y algunos sedimentos.
Son filtros muy duraderos y reutilizables, aunque no son capaces de eliminar virus ni contaminantes químicos.
Paso 4 : Desinfección completa
Una vez que el agua ha sido pretratada, el siguiente paso es la desinfección. Este proceso elimina patógenos presentes en el agua de pozo, reduciendo el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua. Los métodos de desinfección más comunes son:
Cloración
Es uno de los métodos más efectivos para desinfectar el agua. Consiste en añadir cloro o dióxido de cloro al agua, lo que elimina bacterias, virus y parásitos.
La cloración tiene la ventaja que es bastante efectiva y económica, y ofrece una protección duradera útil para su almacenamiento.
Pero lo malo es que el cloro puede reaccionar con materia orgánica y formar subproductos nocivos (como los trihalometanos), que deben ser controlados. Además, poco o mucho afectará el sabor del agua, por esta razón hay que diluir la cantidad correcta en relación a los litros de agua.
Desinfección UV (Ultravioleta)
Estos sistemas utilizan luz ultravioleta para inactivar patógenos. Es un método muy eficaz contra bacterias y virus, ya que la radiación UV destruye su material genético, impidiendo que se reproduzcan.
Sin duda estamos hablando del mejor sistema de desinfección para no introducir productos químicos en el agua, con lo que no hay riesgo de que genere subproductos nocivos. La eficacia de este método depende de la claridad del agua. Si el agua está turbia, la luz UV no penetrará bien, y el tratamiento será menos efectivo.
Ozonización
La ozonización utiliza ozono (O₃), un gas que tiene fuertes propiedades oxidantes, para destruir patógenos en el agua. Este proceso no solo elimina microorganismos, sino también algunos contaminantes químicos.
Es un método de desinfección sin químicos residuales, y el ozono se descompone rápidamente en oxígeno sin dejar residuos.
Como desventaja hay que decir que el equipo de ozonización es costoso, y deja un efecto en el agua que puede ser nocivo a mucha exposición.
Paso 5 : Tipos de filtro para agua de pozo. Filtración avanzada
Para asegurar que el agua sea segura para el consumo humano, es necesario eliminar cualquier contaminante disuelto que pueda estar presente, mediante una filtración más completa y exhaustiva. Los sistemas de filtración avanzada son adecuados para este propósito y pueden adaptarse según el tipo de contaminantes específicos detectados en el análisis inicial.
Ósmosis inversa
La ósmosis inversa (OI) es uno de los sistemas de filtración más efectivos y populares para la potabilización de agua de pozo. Funciona aplicando presión al agua para hacerla pasar a través de una membrana semipermeable, que retiene sales disueltas, metales pesados, nitratos y otros contaminantes. Compara los mejores sistemas de Osmosis Inversa Doméstica del mercado en esta completa guia.
Es un método infalible que proporciona agua de excelente calidad, eliminando hasta el 99% de los contaminantes disueltos.
La parte negativa es que es un procedimiento de purificación lento que requiere electricidad y desecha agua en el proceso. Además, elimina minerales beneficiosos junto con los contaminantes, lo que puede afectar a la composición del agua.
Filtración por intercambio iónico
Este sistema utiliza resinas de intercambio iónico para eliminar minerales específicos del agua. Existen dos tipos principales de resinas de intercambio iónico:
– Resinas catiónicas:
Elimina calcio y magnesio, responsables de la dureza del agua, mejorando su suavidad.
– Resinas aniónicas:
Útiles para eliminar nitratos y otros aniones que puedan estar presentes en el agua de pozo.
La filtración por intercambio iónico es ideal para pozos donde se ha detectado dureza excesiva o presencia de ciertos minerales específicos que afectan la calidad del agua.
Filtración con carbón activado avanzado
Además del uso en la etapa de pretratamiento, el carbón activado puede utilizarse en una etapa avanzada para eliminar compuestos orgánicos persistentes, pesticidas y subproductos de la desinfección (como los trihalometanos) que puedan haber quedado en el agua. Es especialmente eficaz en pozos ubicados cerca de áreas agrícolas.
Filtros UV
Los filtros UV utilizan rayos ultravioleta para desinfectar el agua, matando bacterias, virus y otros patógenos. Este método es ideal cuando se sospecha que el agua puede estar contaminada con microorganismos.
Estos filtros desinfectan el agua sin productos químicos, pero hay que combinarlos con otras fases de filtrado ya que no eliminan sedimentos ni contaminantes químicos.
En sistemas de filtración domésticos los filtros de rayos ultravioleta son específicos para los equipos de osmosis inversa con varias etapas de filtración
En muchos casos, un solo sistema de tratamiento no es suficiente para garantizar la potabilización total del agua de pozo, por lo que es común utilizar sistemas de potabilización combinados. Los sistemas combinados suelen incluir:
-Sistema de pre-filtrado (sedimentos y carbón activado) con descalcificador
-Sistema de desinfección (cloración) con Osmosis inversa y luz Ultravioleta
-Ósmosis inversa o intercambio iónico para contaminantes disueltos
Si quieres saber que tipos de filtros de agua hay en el mercado para un tratamiento combinado, consulta nuestras guías y comparativas de los productos de cada categoría.
Paso 6 : Control y monitoreo de la calidad del agua
Una vez que el sistema de potabilización está en funcionamiento, es fundamental monitorear la calidad del agua de manera periódica. Esto implica realizar análisis regulares para asegurarse de que todos los niveles de contaminantes estén por debajo de los límites permitidos para el consumo humano.
Análisis microbiológico
Debe realizarse cada seis meses para verificar que no haya presencia de bacterias o virus en el agua.
Análisis de contaminantes químicos
Es importante analizar la presencia de metales pesados y compuestos orgánicos cada año.
Mantenimiento del equipo de tratamiento
Cada componente del sistema de potabilización (como los filtros de carbón activado, membranas de ósmosis inversa y sistemas UV) tiene su propio requerimiento de mantenimiento. Sustituir filtros y limpiar los equipos según el manual del fabricante garantizará su efectividad y prolongará su vida útil.
Hasta aquí el procedimiento paso a paso de cómo potabilizar agua de pozo con todas las garantías de seguridad y calidad del agua.
Como hemos visto es importante analizar el agua des de un inicio para saber cual es el sistema que tendrá más importancia en el proceso y así poder seguir un orden de tratamiento correcto y exhaustivo para cada paso.
No paséis por alto la importancia de tratar el agua de pozo y monitorizarla periódicamente, ya que al no estar conectada a una red de subministro oficial, requerirá de un proceso de potabilización específico.
Gracias por leer y espero que te haya servido de ayuda para conseguir agua potable en tu terreno. ¡Salud!
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